El hígado es conocido por su capacidad de depurar y por su implicación en la digestión con la bilis. Pero ¿de qué manera trabaja y como podemos asegurarnos de que lo haga de la mejor manera posible? Vamos a conocer este órgano y su importancia para la salud, así como algunos consejos para cuidarlo.
El hígado y sus funciones
El hígado se localiza por debajo de los pulmones y diafragma, situado al lado derecho del abdomen. Es uno de los órganos más grandes del cuerpo humano. Su peso oscila entre 1,3 y 1,6 kg.
Esta parte del cuerpo tiene dos funciones por las que es conocido, y una tercera a veces poco conocida. Veamos sus 3 cometidos:
- Ayudar en la digestión de los alimentos. Lo hace gracias a la bilis que segrega, que ayuda a extraer nutrientes de los alimentos.
- Contribuir en la eliminación de elementos tóxicos que pueden llegar al organismo a través de alimentos, o bebidas.
- Ayudar en el almacenaje de energía. Se realiza en forma de glucógeno, un tipo de sustancia que al organismo le es fácil utilizar.
Así pues, un hígado sano permite unas buenas digestiones, y una buena nutrición, además de una alta capacidad de desintoxicación del organismo. Pero ¿y si mi hígado no funciona bien?
Si el hígado está dañado es posible que sea causa de una enfermedad o alteración. En este caso, es posible que exista un deterioro de las funciones de este órgano. Por ejemplo, el hígado puede deteriorarse como consecuencia de padecer enfermedades de tipo vírico como las hepatitis, por enfermedades autoinmunitarias o hereditarias o por abuso de alcohol, entre otras causas.
Cuidar el hígado, ¡un órgano clave para la salud!
Para prevenir que las funciones del hígado puedan deteriorarse y que nuestra salud no se resienta, vamos a proponerte algunos consejos para cuidarlo:
1. Modera tu consumo de alcohol si quieres cuidar tu hígado
De hecho, el mejor consejo seria que no bebieras nada de alcohol. Al procesarlo el hígado tarda más de lo habitual, por lo que, la acumulación de este líquido en el hígado resulta tóxico llegando a causar inflamación. Así pues, el alcohol, cuanto menos, mejor.
2. Comida saludable
Una dieta equilibrada en cuanto a nutrientes nos asegura que el organismo recibe todas las sustancias que necesita para poder realizar todas sus funciones. Pero si además los alimentos que consumimos son lo más natural posible, y minimizamos el consumo de alimentos procesados, el nivel de tóxicos que tiene que procesar el hígado es menor. Apuesta por alimentos con denominación Bio, que aseguran que entre sus componentes no hay sustancias o pesticidas químicos que puedan ser origen de un trabajo extra para el hígado.
3. Los medicamentos también llegan al hígado
En general, no se debe abusar de los medicamentos en ningún momento y menos sin prescripción médica. El motivo es que el hígado es el órgano que ayuda a degradar estos remedios farmacéuticos. Sin embargo, la descomposición de estos puede ser más lenta en algunas personas y es uno de los motivos por los que se puede presentar daño hepático, o pequeñas hepatitis. Así que, medicamentos, solo lo que sea estrictamente necesario.
4. Mantener relaciones sexuales con precaución
En los casos de hepatitis provocada por virus, esta puede contagiarse por contacto con sangre o fluidos corporales entre personas. Por esta razón es importante que utilicemos protección al mantener relaciones sexuales.
5. Aléjate de tóxicos volátiles
Pinturas, insecticidas o sustancias con tóxicos químicos que puedan ser inhalados pueden también pasar a formar parte de nuestro riego sanguíneo y acabar en nuestro hígado. Para hacer un uso adecuado de estos productos asegúrate de leer las indicaciones del fabricante. Protégete con mascarillas, gafas de protección y manteniendo la zona bien ventilada.
6. Proteger la piel de sustancias tóxicas
La piel es el órgano más extenso del cuerpo humano, y aunque actúa de barrera, también es permeable y permite el paso de sustancias al interior del organismo. Por esto, es recomendable que cuidemos lo que nos ponemos y prestemos atención a los ingredientes que contienen las cremas o jabones ¡Cuida el hígado desde fuera!
7. Mantener un peso saludable
Una persona con un sobrepeso, u obesidad, con un porcentaje de grasa corporal elevado tiene mayor predisposición a padecer hígado graso no alcohólico. El exceso de grasa que se almacena en las células hepáticas a la larga puede provocar inflamación hepática, cirrosis o insuficiencia hepática.
Pero, además de estos consejos, si la salud de tu hígado te preocupa y quieres potenciar los efectos de las sugerencias que te hemos dado, puedes sumar a tus rutinas de cuidados Liver de Sura vitasan. Liver es un complemento alimenticio a base de una combinación de 7 extractos de plantas, que contribuyen al normal funcionamiento del hígado.
Entre sus ingredientes está el extracto de hoja de alcachofa que favorece el confort digestivo, y la cúrcuma que protege a las células frente al daño oxidativo. ¿Quieres saber más sobre este complemento? Puedes ver este video consejo nutricional, en el que te explicamos un poco más sobre este gran aliado del hígado.
¿Y qué hay de las dietas detox?
Lo cierto es que el hígado, si recibe alimentos adecuados y de calidad, es capaz de desintoxicar el organismo y a sí mismo. Entonces, ¿es necesario una dieta detox? Puedes probar este método, pero una dieta detox no compensa los excesos que hayas podido haber hecho los últimos meses. Por eso, la mejor recomendación es que sigas habitualmente una dieta equilibrada, natural y de calidad. Y sobre todo evita tanto el alcohol como el exceso de sustancias tóxicas o fármacos. ¡Esto sí que es detox!
El hígado es una de las víctimas de nuestros malos hábitos ¿Listos para dejar nuestro hígado nuevo?